El gobernador de Nuevo León, Samuel García, aclaró a la población que la alta concentración de partículas en el aire registrada en Monterrey y su zona metropolitana no se debía a la contaminación, sino a un remolino de aire proveniente de Texas y Coahuila. En un video difundido a través de sus redes sociales, el mandatario estatal explicó que este fenómeno fue originado por un frente frío que trajo vientos fuertes, con rachas de hasta 70 kilómetros por hora.
“Es realmente una tolvanera la que está entrando a la ciudad, no es contaminación”, comentó García en su mensaje. Agregó que si hubiera sido una situación de contaminación, ya se habría activado una declaratoria de contingencia ambiental. “Lo que tenemos es mucho polvo que llegó con este frente frío, y permanecerá hasta las 4 de la tarde», explicó.
La Secretaría de Medio Ambiente emite alerta de contingencia por partículas suspendidas
Minutos después de este mensaje, la Secretaría de Medio Ambiente del Estado activó la alerta de contingencia ambiental debido a la presencia de partículas suspendidas en el aire, que afectaron la calidad del ambiente. A pesar de la aclaración inicial de García, las autoridades confirmaron que los niveles de partículas fueron lo suficientemente elevados como para justificar la contingencia, aunque el origen del problema no era contaminación industrial, sino el polvo arrastrado por los vientos.
Vientos fuertes causan incendios y daños en infraestructura de la ciudad
El ingreso del frente frío número 31 provocó no solo un gran remolino de aire , sino también múltiples incidentes en la ciudad. Durante la mañana, los fuertes vientos causaron una serie de incendios, caídas de árboles, anuncios y postes, además de cables derribados y cortos circuitos. Estos eventos generaron múltiples daños en la infraestructura de la ciudad.
Precauciones y monitoreo continuo de la situación
El gobernador reiteró que las condiciones meteorológicas seguirán afectando la calidad del aire, y solicitó a la población tomar precauciones, especialmente a personas con problemas respiratorios, para minimizar el impacto de la alta concentración de polvo.
Las autoridades seguirán monitoreando la situación y mantendrán informada a la ciudadanía sobre cualquier cambio relevante en las condiciones ambientales.