La participación de Peso Pluma en el Festival Viña del Mar, programado para el 1 de marzo, ha generado polémica debido a las letras de sus canciones que abordan temas vinculados al narcotráfico y la violencia.
A pesar de las críticas y la oposición de diferentes sectores, el artista de 24 años, reconocido por sus «corridos tumbados», ha confirmado su presencia, desatando un debate sobre los límites entre la libertad artística y la responsabilidad social en eventos de gran envergadura.